Durante el pasado mes de Noviembre, junto con la Escuela de Supervivencia Anaconda1, realicé el curso de especialización en selva, en el rio Xingu, afluente del gran Amazonas (Brasil).
Dos semanas intensas de aprendizaje en una amplia variedad de técnicas, materiales y costumbre locales. Gracias a las instalaciones que dispones la escuela en el rio para asistir a los ribereños, un hospital de selva y la escuela para los niños, la adaptación previa a la vida en la selva fuera mas llevadera.
Dentro del marco de la técnicas básicas, destacamos las de fuego; por fricción manual, fricción por arco y fricción con bambú, dentro de las clásicas dentro del entorno. Adicionalmente, y aunque pudiera parecer redundante, la practica con firesteel, lupa, y diferentes materiales para conseguir fuego por concentración de la luz solar.
La obtención de recursos del entorno selvático resulta indispensable para la supervivencia. La hidratación es la prioridad numero uno dentro de la selva, por encima del fuego. La selva provee todo lo necesario si se sabe donde buscar. Desde agua de las propias lianas de la selva hasta pegamentos naturales, la selva es un autentico supermercado/ferretería.
Obtener alimentos, construir refugio, fabricar enceres para la vida cotidiana se convierten en objetivos del día a día para quienes quieren aprender a vivir en este medio inhóspito y salvaje.
Tras dos semanas en el mas absoluto retiro y distanciamiento de la civilización, el resultado del curso es una completa satisfacción por todo el conocimiento adquirido, las experiencias vividas y una nueva percepción de lo que nos rodea. No siempre la ausencia de comodidades significa la ausencia de la felicidad.